Cómo Negociar una Deuda de Tarjeta de Crédito de forma sencilla

Introducción

Entendemos por experiencia propia lo estresante que pueden ser las deudas de tarjetas de crédito cuando ya no puedes pagarlas más (ya sea por enfermedad, falta de ingresos o porque su CAT promedio o tasa de interés es excesivamente alta) y que comienzan el acoso y amenaza de los cobradores.

En muchos artículos pasados hemos explorado qué puede pasar en estos casos y sus posibles consecuencias legales. Sin embargo, y también como siempre lo hemos dicho: para el acreedor siempre será mejor llegar a un buen acuerdo que a un pleito legal que le puede salir carísimo y no le garantiza que pueda obtener un beneficio. En este artículo que escribimos para tí, te diremos cuál es el proceso de cómo negociar una deuda de tarjeta de crédito para que así puedas acabar con tus deudas y todo el estrés que generan.

El proceso de cómo negociar una deuda de tarjeta de crédito es muy sencillo y consiste de 3 partes: 1) investigación, 2) tomar acción y 3) cumplir con los acuerdos pactados

Partes del proceso de cómo negociar una deuda de tarjeta de crédito

Parte 1: Investigación

a) Conocer la situación de la deuda

El primer paso es tener claro cuánto es lo que se debe exactamente. Una técnica muy común de despachos de cobranza el nombrarte montos que no reconoces, o que la deuda ha incrementado de manera desproporcionada. En muchos casos si aumentará debido a los intereses moratorios y otras comisiones que se cobrarán por no cumplir en tiempo y forma. Sin embargo, tu debes de contar con la información definitiva, y esta información la encontrarás consultando tu historial crediticio (normalmente tendrá un mes de retraso la actualización de ésta) y obteniendo un estado de cuenta por parte de tu acreedor en el cual se listarán los montos amortizados, el saldo insoluto de capital, los intereses ordinarios generados, comisiones y cualquier otro accesorio que sea listado en la carátula de tu contrato de otorgamiento de crédito. Recuerda que nadie te puede negar dicha información, y en dado caso que suceda, puedes poner tu queja en el Portal de Queja Electrónica de la CONDUSEF

b) Prepararse para la negociación

Una vez que tienes toda la información referente a tu crédito, ahora viene el momento de prepararse con otros temas adicionales, deberás de hacer un presupuesto para analizar de forma correcta tu capacidad de pago para que puedas establecer un presupuesto realista de cuánto puedes pagar y por cuánto tiempo. Contar con recursos antes de negociar es un tema importante, ya que te permitirá llegar a acuerdos más rápidos y convenientes tanto para tí como para el acreedor. Otra cosa que deberás de hacer es saber tener diálogos y negociar bajo presión, aún cuando los cobradores pueden ser agresivos contigo. De lo contrario, puede ser que la opción que te ofrezcan no sea conveniente para tí, y nuevamente te hayan orillado a un círculo interminable de deudas. En internet, encontrarás miles de recursos y videos que te podrán ayudar a aprender la técnica de negociación que se ajuste a tus necesidades.

c) Investigar las opciones de negociación

El mundo financiero no sería nada sin aquellos productos diseñados para ayudar a las personas a poder recuperarse de un descalabro financiero: consolidación de deuda, refinanciamientos, transferencia de saldos, negociación de plazos o de tasas de interes o de saldos pendientes, etc. Deberás de averiguar las opciones que tu banco normalmente ofrece, así como las ventajas y desventajas de cada uno de ellos, para que puedas decidir cuál es el que más te conviene. Siempre revisa los nuevos plazos o tasas de interés que te ofrezcan, de lo contrario terminarás pagando 2 o 3 veces tu adeudo original, algo muy común en México.

Parte 2: Tomar Acción

a) Preparar una propuesta de negociación

Una vez que tengas una idea clara de tu situación financiera, los términos y condiciones que firmaste, y cuáles son las opciones de negociación disponibles para tí, es hora de tener una propuesta con la cual te puedas comunicar con el acreedor. Establece un presupuesto realista con un monto que realmente puedas pagar para evitar que puedas volver a tener atrasos y por consiguiente puedas volver a caer en deudas.

b) Comunicarse con la entidad acreedora

Ya todo preparado ahora tendrás que comunicarte con tu entidad acreedora, recomendamos primero siempre hablar por teléfono antes que ir a una sucursal de tu banco (luego los ejecutivos te mandan a un teléfono, ya que ellos no atienden normalmente estos casos), es importante que al comunicarte mantengas una actitud amigable y respetuosa, y que expliques claramente las razones por las cuales no pudiste cumplir con tus obligaciones, y que requieres de conciliar para poder cerrar los pendientes que tienenes con el acreedor.

c) Negociar los términos del acuerdo

Escucha atentamente a las propuestas que el acreedor te ofrezca, así como anota toda la información necesaria. ¡Nunca firmes algo en ese momento ya que puedes tomar una mala decisión! es importante que calcules cuánto terminarás pagando, o que analices a profundidad las ventajas y desventajas de la propuesta, para así saber si también te favorece, o si solamente está beneficiando al banco. .

Si tienes dudas de que una propuesta sea adecuada para tí, buscar la asesoría legal y financiera de una reparadora de crédito podría ser lo que necesitas, de esta forma podrás liquidar tus deudas con el mayor descuento posible, y en mensualidades que realmente puedas pagar.

d) Confirmar el acuerdo por escrito

Una vez que hayas alcanzado un acuerdo y hayas hecho algunas contrapropuestas, asegúrate de obtener el acuerdo o nuevo contrato por escrito y lee detenidamente toda la información que incluye. Verifica que el acuerdo refleje lo que acordaste y obviamente guarda una copia de todos los documentos por si lo llegas a necesitar en el futuro. En especial si tu acreedor decide no respetar el acuerdo negociado.

Parte 3: Cumplir con los Acuerdos Pactados

a) Cumplir con el acuerdo

Podría parecer obvio, pero una gran cantidad de las personas que llegan a un acuerdo, al final lo terminan rompiendo. Es importante que tus finanzas estén bien organizadas para que puedas ir pagando en tiempo y forma. En muchas ocasiones, las penalizaciones por romper un acuerdo con un acreedor pueden ser más severas, podrás endeudarte aún más o seguir dañando tu historial crediticio y por lo tanto podrías tener consecuencias aún más graves en tu salud financiera. ¡Recuerda que cumplir con el acuerdo demuestra tu seriedad y compromiso para cerrar tu adeudo pendiente!

b) Si vuelves a tener problemas, ¡comunícate de inmediato con tu acreedor!

Sabemos que a veces nos puede llover sobre mojado, y en estos casos si nuevamente tienes dificultades para cumplir con el acuerdo, comunica de inmediato a la entidad acreedora. Es preferible anticiparte y solicitar ayuda antes de que surjan nuevamente problemas con ellos. Mantén siempre una comunicación abierta, amable y muestra tu compromiso para liquidar tu adeudo de manera responsable.

Conclusiones

Negociar una deuda de tarjeta de crédito puede ser desafiante, por eso, respetar el proceso de cómo negociar una deuda de tarjeta de crédito es fundamental para acabar con tus deudas que ya no puedes pagar. Recuerda que tener una buena estrategia y una comunicación efectiva y asertiva son claves para lograr acuerdos que te favorezcan. Además, una reparadora de crédito confiable como Mejora Buró pudiera ser la solución que necesitas para liberarte de todo el estrés que te está causando este tema de sobreendeudamiento.